Girardi se sale con la suya

“Nos metieron el dedo en la boca” sería la frase ideal para decir que una vez más pasamos por lesos. Esto referido a todas las instancias en que algún vendedor ambulante nos vendió un producto fallido, un gitano nos reveló chantamente el futuro o una empresaria nos vendió la pomada con “quesitos de exportación”. Del tema no están exentos nuestros queridos políticos. Pero esto último ya no parece increíble. Son años de mucha historia en que político tras otro no ha hecho nada más que desempeñarse como corrupto.

El que por estos días salió al tapete, es el senador del Partido Por la Democracia (PPD), Guido Girardi, tras la decisión del fiscal Iván Millá, que lo deja fuera del caso Publicam por no haber encontrado antecedentes que lo vinculen.

Recordemos que el pobre senador fue de alguna manera humillado en octubre de 2006, luego de descubrir el uso de dos facturas falsas (facilitadas por Publicam) para rendir gastos electorales de Campaña, estos en un comienzo por un monto de 24 millones de pesos, a los que más tarde se comprueba que los montos superaban los 55 millones de pesos. Así fue como presentaron estas facturas al Servicio Electoral (Servel) como justificación de sus gastos para después pedir un reembolso. Entre estos se encontraba el arriendo de sedes y la prestación de Servicios de Transportes que aparentemente no existieron.

En primera instancia Girardi se defendió débilmente argumentando que la utilización de estas fue ante la necesidad de pagar a sus brigadistas, a lo que más tarde reconoce que efectivamente su comando las utilizó pero sin su consentimiento.

De igual modo sus justificaciones no impidieron que el Servicio de Impuestos Internos se querellara a principio del presente año contra éste y contra todas las personas que estuvieran involucradas con la compra de facturas falsas a la “Empresa Fantasma” (Publicam), tales como el comando de Lily Pérez y Sebastián Piñera, entres otras empresas como Bravíssimo y Coppelia.

“La querella se basó en el artículo 97 Nº 4, en sus incisos 3 y 4 del Código Tributario, que establecen que las personas que usen como medio para cometer ilícitos las facturas falsas, se les aplicarán penas de cárcel y multas de 40 Unidades Tributarias Mensuales”. (fuente La Nación)

Volviendo a la noticia de estos días, el pasado sábado 29 de septiembre, durante la cita del PPD en Valparaíso, habló sobre su regreso con la frente alto, manteniendo firme su idea de que él siempre dijo la verdad. Además hizo referencia a un “aprovechamiento político” por parte de los que lo quieren, según él, perjudicar.

Entonces, ¿quién es el malo de la historia? La culpa recayó en su administrador electoral, Ricardo Farías, por estafas al Servel.

Con respecto a cómo lo tomaron los partidos, el PPD le dio el completo apoyo y están muy contentos con la decisión. En tanto RN, no han mostrado la misma cara. Ejemplo de ello es la opinión del RN Francisco Bayo, calificando de lamentable tal decisión, ya que era muy evidente su vinculación con el caso y que lo más probable que la determinación haya tenido que ver con alguna supuesta influencia política.

Ya está dicho. Un final feliz para el PPD, partido de la “ideología de la corrupción”, como dice ex PPD Jorge Schaulsohn(quien uso el caso Girardi como uno de sus argumentos de salida del partido). Yo digo, un hecho más que se suma a la infinita lista de los que nos hacen tontos.

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A continuación un video humorístico que hace referencia a la corrupción política titulado "Oda a Chiledeportes y Guido Girardi". A fin y al cabo no es tan malo reirse unos minutos de nuestras desgracias. ¡Disfrútenlo!

Camila Manríquez