¿Realmente, no estamos ni ahí?

Corrupción, "koalazos", peleas entre políticos y partidos, coimas, inestabilidad política, malos planes de gobierno, mala ejecución en las políticas públicas. Estos son algunos de los factores que desmotivan a los jóvenes a la hora de hablar de política, pero ¿realmente no están ni ahí? ¿O es sólo la impresión que se deja entre ver? ¿No será que el desinterés en los temas públicos de la actualidad es una manera de protestar frente al actual sistema?

A la hora de preguntarle a los jóvenes qué es lo opinan sobre el papel que desempeñan ellos en la política, podemos darnos cuenta que en realidad si es un tema que les interesa y afecta directamente, pero no siempre tienen el espacio para expresarse e integrarse con la vida pública. Los porqués se encuentran al conversar con los mismos jóvenes, quienes nos cuentan sus versiones sobre cual es el papel que ellos desempeñan en este juego.

Luís Emilio, es estudiante de 2º año de Ingeniería Comercial de Los Andes, hace referencia al papel que cumplen los jóvenes dentro de los partidos políticos y la falta de atención a sus ideas, “Yo estoy inscrito y me identifico con un partido, no voy a decir cual es, pero las oportunidades para los jóvenes son pocas. Tenemos ideas, pero no son tomadas en cuenta”.

¿Será este realmente el problema?, según el futuro periodista, Boris Pinto, la culpa no es sólo de los partidos o de los políticos, si no también en gran parte de los jóvenes. “La irresponsabilidad está en no inscribirnos, en no ir a catetear a un partido político. Es súper fácil inscribirse en uno y tal vez no lo hacemos porque vemos que la postura es muy complicada, engorrosa, ahí falta comunicación, hay falta de información. Falta que nosotros nos enteremos más (…)”.

¿Cuáles serían las soluciones a este problema? La Secretaria General de Renovación Nacional, Lily Perez, plantea: “(…) a los jóvenes hay que abrirles la puerta, la mayoría no recibe nunca a los jóvenes. El papel de los jóvenes es ser crítico con el sistema, para mover el sistema, ser crítico por el lado de las ideas, no es necesario salir a quemar una micro para ser escuchados (…).
Totalmente opuesto en cuanto a ideología política, pero coincidente en cuanto al papel de crítica de los jóvenes, está el Diputado Marco Antonio Enríquez Ominami (PS). Al referirse a este punto nos cuenta que “los jóvenes deben criticar y sospecharlo todo, ese es su papel”.

Distintas versiones, opiniones, postura y soluciones se discutieron a raíz de del seminario organizado en la U de Los Andes, “Jóvenes: el futuro en tus manos”. De donde pudimos percatarnos del interés político que tienen los jóvenes, pero de lo difícil que es abrirse camino y formar parte de este juego. Las oportunidades, aunque a veces algo lejanas, están, sólo tenemos que actuar. Debemos utilizar los defectos de la política para incentivarnos a participar en ella. Seamos críticos de lo que ocurre, pongamos en práctica nuestros conocimientos, entremos al juego que recién comienza.